Cómo escribir un libro: 8 pasos esenciales para autores de no ficción

Ariel Ortuño

Autor, Mentor de Autores y Conferencista

Ariel Ortuño

Autor, Mentor de Autores y Conferencista

Descubre cómo escribir un libro de no ficción en 8 pasos esenciales. Desde la preparación hasta la redacción. Mi nombre es Ariel Ortuño y con la experiencia de haber publicado 13 libros y de acompañar a docenas de autores, te guiaré en el proceso para crear un libro profesional.

¿Alguna vez has soñado con ser un autor publicado? ¿O con tener tu propio libro en las manos, sintiendo ese orgullo indescriptible de haber plasmado tus ideas y experiencias en una obra que perdurará en el tiempo?

Si es así, has llegado al lugar correcto. Como director de la agencia literaria Autores Implacables, he ayudado a docenas de escritores a hacer realidad sus sueños de publicar libros de no ficción profesionales. Así, compartiré contigo los secretos que he aprendido a lo largo de mi carrera como autor de 13 libros.

Escribir un libro no es tarea fácil, pero con la guía correcta y una mentalidad enfocada, puedes lograrlo. Así que prepárate para sumergirte en los 9 pasos esenciales que te llevarán a crear un libro profesional inolvidable.

Este artículo no se refiere a escribir novelas, sino a libros de no ficción, que son obras basadas en la realidad, diseñadas para mejorar la vida del lector. Pueden ser autobiografías, libros para inspirar, guías para resolver problemas, revelaciones de conceptos nuevos, metodologías, o medios para incrementar la credibilidad y compartir experiencias valiosas. Así que, si te has preguntado cómo escribir un libro de mi vida o estás buscando títulos para un libro de mi vida, aquí encontrarás todo lo que necesitas para comenzar tu viaje como autor de no ficción.

Si quieres conocer los pasos para escribir una novela da clic aquí: Cómo escribir una novela

1. Encuentra tu Propósito
Reflexionar sobre el motivo por el que quieres escribir es el primer paso crucial en el proceso de creación de un libro de no ficción. Un propósito claro no solo proporciona dirección, sino que también te ayuda a mantener la motivación durante todo el proyecto. En mi experiencia, cada libro que he escrito ha tenido un propósito claro, ya sea compartir conocimientos sobre liderazgo y persuasión o ayudar a las personas a mejorar sus habilidades de comunicación. Tener este objetivo en mente me ha permitido enfocarme y conectar con mis lectores de manera significativa.

Para facilitar el proceso de encontrar tu propósito, aquí tienes algunas recomendaciones:

  1. Reflexión. Dedica tiempo a pensar en la respuesta a las siguientes preguntas: ¿Qué mensaje quieres transmitir? ¿Qué impacto deseas tener en tus lectores? ¿Qué esperas lograr en tu vida con el libro?
  2. Escribe tus motivaciones. Anota todas las razones por las que deseas escribir. Esto puede incluir compartir experiencias personales, educar a otros o establecerte como experto en tu campo.
  3. Identifica tus metas. Define qué deseas lograr con tu libro. ¿Quieres cambiar la percepción de las personas sobre un tema específico? ¿Quieres inspirar o motivar a otros?
  4. Consulta a otros. Habla con amigos, colegas o mentores sobre tu idea. A veces, una perspectiva externa puede ayudarte a clarificar tu propósito.
  5. Revisa y ajusta. A medida que avanzas en tu escritura, revisa tu propósito y ajústalo si es necesario. Es normal que cambie mientras escribes, me ha pasado varias veces.

Por último, cuando tienes claridad de para qué escribes un libro, esto le da dirección a tu narrativa. El mensaje es el mismo, pero la forma de compartirlo se debe ajustar para que también se logre tu propósito.

2. Define a tu Audiencia

Conocer a tu audiencia es fundamental para escribir un libro relevante y atractivo. Antes de comenzar a escribir, dedica tiempo a imaginar a tu lector ideal. Piensa en su edad, género, nivel educativo, intereses y conocimientos sobre el tema que tratarás. Por ejemplo, si estás escribiendo sobre liderazgo, deberás contemplar si tu información funcionará mejor para directivos o personas que están buscando subir de puesto. Al mismo tiempo, tu lenguaje deberá ser más accesible y comprensible si se trata de un público más general.

En mi experiencia, cómo definir a tu lector meta te permite adaptar el contenido y estilo de escritura para satisfacer sus expectativas y necesidades. Un ejemplo que puedo compartir es el de un abogado que nos contrató para ayudarlo con su libro; al principio, su escritura era demasiado técnica y formal, casi como un contrato legal. ¡Era muy aburrido! Al identificar a su audiencia como lectores “no especializados”, le ayudamos a ajustar su lenguaje para hacerlo más atractivo.

Elige el Género Literario Adecuado

Seleccionar el género literario adecuado es crucial para el éxito de tu libro. Los géneros de no ficción más comunes incluyen autobiografías, ensayos, libros de autoayuda y obras académicas. Cada género tiene características distintivas:

  • Autobiografías: Narran la vida del autor, centrándose en experiencias personales significativas.
  • Ensayos: Abordan un tema específico, proporcionando análisis y opiniones del autor.
  • Libros de autoayuda: Ofrecen consejos prácticos para mejorar aspectos de la vida del lector.
  • Obras académicas: Presentan investigaciones y estudios detallados sobre un tema particular.

Para elegir el género adecuado, reflexiona sobre tu propósito y audiencia. Si deseas inspirar con tu historia personal, una autobiografía es ideal. Si buscas educar o cambiar percepciones, un ensayo o libro académico podría ser más apropiado. Conocer las expectativas de tu audiencia te ayudará a definir el tono y estilo de tu libro, asegurando que tu mensaje resuene efectivamente.

Pasos para definir a tu audiencia:

  1. Imagina a tu lector ideal. Piensa en su edad, género, ocupación, nivel educativo e intereses.
  2. Punto de partida. Reflexiona en qué debería estar pasando en la vida del lector para que le interese tu libro.
  3. Resultado deseado. Define con claridad a dónde llevarás al lector con tu libro. Es decir, cuál es la promesa por la que comprará tu libro.
  4. Adapta tu lenguaje. Ajusta tu tono y estilo según el perfil de tu audiencia.
  5. Implementación de contenido. Piensa en los problemas que tu audiencia podría enfrentar para la aplicación de lo que propones, de modo que se pueda realizar con facilidad.

3. Investiga y Estructura tu Contenido

Es necesario que respaldes la información más importante de tu libro de no ficción. Por un lado, para que confirmes si lo que estás por compartir le servirá a la mayoría y por otro para ampliar tu conocimiento. Comienza identificando fuentes confiables y actuales que respalden tus argumentos. Utiliza diferentes materiales, como libros, artículos académicos, estudios y entrevistas con expertos. Esto no solo enriquecerá tu contenido, sino que también te dará credibilidad.

Herramientas Tecnológicas Útiles

Para organizar y redactar un libro de manera eficiente, es esencial utilizar herramientas tecnológicas que faciliten el proceso. Aquí te presentamos algunas de las más útiles:

  • Google Drive: Ideal para almacenar documentos y acceder a ellos desde cualquier dispositivo. Permite la colaboración en tiempo real con coautores y editores.
  • Trello: Excelente para gestionar el progreso del libro. Con sus tableros y tarjetas, puedes planificar capítulos, tareas y fechas límite de manera visual.
  • Scrivener: Una herramienta potente para la redacción y organización de manuscritos largos. Ofrece funciones avanzadas como la vista de corcho, plantillas y la capacidad de dividir el texto en secciones manejables.
  • Evernote: Perfecta para tomar notas rápidas y recopilar ideas. Su sistema de etiquetas facilita la organización de pensamientos y referencias.
  • Grammarly: Ayuda a mejorar la gramática y estilo del texto, asegurando un manuscrito pulido y profesional.

Estas herramientas te ayudarán a mantenerte organizado y enfocado durante todo el proceso de escritura, lo cual es crucial si estás buscando cómo escribir un libro con inteligencia artificial o utilizando otros recursos tecnológicos.

Pasos para investigar y estructurar tu contenido:

  1. Identifica fuentes confiables. Pueden ser libros y artículos académicos. También estudios y estadísticas actuales o entrevistas con expertos del tema. Incluso puedes buscar en sitios de divulgación científica, aunque suelen estar en inglés.
  2. Organiza la información. Utiliza herramientas como hojas de cálculo o mapas mentales. Puedes crear un archivo para cada fuente. También puedes apoyarte de la inteligencia artificial y confirmar los datos en los buscadores web.
  3. Crea un esquema detallado. Divide tu libro en capítulos y subcapítulos, de manera que haya una secuencia lógica de entendimiento para el lector.
  4. Integra datos y citas. Asegúrate de citar las fuentes que respaldan tus ideas de manera correcta. Si compartes conocimiento cuya fuente no localizaste, es mejor que lo comentes en tu libro para evitar que el lector concluya que es tuyo.
  5. Revisa y ajusta la estructura de tu libro. Ajusta según sea necesario para mantener la coherencia y la fluidez.

Ten presente no sobrecargar a tus lectores con demasiados datos técnicos; presenta la información de manera clara y comprensible, siempre alineada con tu audiencia y propósito. Finalmente, tener la estructura de tu libro desde el inicio es como contar con un mapa que te guía durante la escritura, evitando que te desvíes del tema principal.

4. Crea un Ambiente de Escritura

A la hora de escribir es indispensable un lugar que te permita hacerlo de acuerdo con tu personalidad. En mi caso, a pesar de que trabajo en el ramo editorial, no escribo en mi horario laboral, sino muy temprano. Cuando estoy escribiendo un libro me levanto alrededor de las cinco y media de la mañana para comenzar mi narrativa. Termino mi sesión cerca de las siete de la mañana, horario en el que suelo levantarme de manera habitual cuando no escribo. Esa es mi rutina, pero para ti puede funcionar diferente.

Pasos para crear un ambiente de escritura:

  1. Encuentra un espacio dedicado. Por lo general un lugar tranquilo puede ser la mejor opción. No obstante, no para todos es igual. Uno de nuestros clientes escribía en una cafetería muy concurrida cercana a su trabajo.
  2. Consistencia. Con independencia del sitio que prefieras, te recomiendo que siempre sea el mismo lugar. La razón es que tu mente se va condicionando a que ahí escribes; de tal suerte que, con cada sesión, se hace más sencillo fluir mientras escribes.
  3. Establece un horario de escritura. Un libro se escribe una vez en la vida, así que los ajustes en tu rutina no serán permanentes. Derivado de esto, busca espacios de tu día donde no seas tan solicitado por la gente, aunque implique escribir muy temprano, a media tarde o por la noche.
  4. Minimiza las distracciones. El celular suele ser la distracción principal. Lo que puedes hacer es activar el modo “No molestar” o “Avión”. También es necesario pedir que no te molesten en tu horario de escritura a las personas que pueden interactuar contigo en ese momento: tu pareja, tus hijos o algunos compañeros de piso.
  5. Crea un ambiente cómodo. La comodidad de tu silla y la altura de tu escritorio pueden ser un factor que complique el proceso, tómalo en cuenta. Lo mismo sucede con la iluminación y los ruidos. También puedes usar audífonos para escuchar música que te agrade, solo procura que no tenga letra o que sea en un idioma que no domines; esto, para evitar que tu mente se vaya con las canciones.

Crear un ambiente de escritura adecuado es clave para facilitar el proceso de cómo escribir un libro rápido y mantenerte enfocado y motivado a lo largo de todo el proyecto.

5. Desarrolla tu Voz y Estilo

Lo que marca una gran diferencia entre un libro escrito por una persona y un libro escrito por la inteligencia artificial es tu propia voz, tu estilo único. De hecho, también es lo que marca la diferencia entres autores, cada cual puede hablar del mismo tema, pero nunca de la misma manera. De ahí la importancia de que escribas con tu estilo. 

También te pueda interesar: Cómo escribir un libro con inteligencia artificial

Pasos para desarrollar tu estilo:

a) Estructura tu libro. Cuando no estás muy acostumbrado a expresarte por escrito en textos largos, sueles divagar mucho; justo como cuando hablas. La diferencia es que al escribir careces de elementos del lenguaje no verbal, con lo que el lector sí se centra solo en tus palabras. 

b) Escribe como hablas. Ciertamente no hablamos como escribimos, pero me refiero a que, una vez que sepas qué va primero, te pongas a escribir sin parar. Habrá partes que no te agraden mucho, no las borres, en mayor medida trata de fluir con la escritura. Una vez que termines de expresar tus ideas podrás hacer ajustes o cambios.

c) Lee mucho y variado. A este respecto no se trata solo de leer por el conocimiento, sino también de prestar atención a la manera en que se redacta la información. La razón principal es para que tengas una noción más clara sobre qué tan profesional suena tu libro. 

d) Retroalimentación. El punto de vista de otras personas puede ayudarte a mejorar tu narrativa; sin embargo, cuida a quién le pides una crítica. 

e) Sé auténtico. Con independencia de la retroalimentación que recibas, habrá elementos que forman parte de tu esencia, los cuales deberías conservar. Por supuesto, asumiendo que habrá gente a la que le agrades por ello y también, gente a la que le desagrades por lo mismo. 

f) Constancia y consistencia. Mientras escribes tu libro, y sobre todo después de recibir la retroalimentación, vendrán a ti diferentes temores. Al menos en la mayoría de los casos. Así, lo ideal es que sigas escribiendo hasta terminar. Si experimentas miedo, pues escribe con miedo, pero nunca te detengas. 

6. Escribe el Primer Borrador

No te preocupes por la perfección en esta etapa. El objetivo del primer borrador es simplemente plasmar tus ideas en papel. Escribe de manera fluida, respeta la estructura que planeaste y no te detengas a corregir cada error. La edición vendrá después. Este es el momento para dejar que tus ideas fluyan libremente. 

Pasos para escribir el primer borrador:

a) Adhiérete a la estructura. Mientras estás escribiendo te van a llegar muchas ideas de temas alternos que podría ser importantes e, incluso, interesantes para tu lector. No obstante, si vas añadiendo todas tus ideas, podrías echar a perder todo tu trabajo. Lo ideal es que todas las ideas las anotes en un archivo de notas, de modo que cuando termines de escribir tu manuscrito tengas una visión más amplia de qué incluir y qué no. A grandes rasgos, el mejor criterio se logra con la siguiente pregunta: ¿Esta información realmente es relevante para que el lector comprenda e implemente mejor el contenido del libro? 

b) Escribe sin editar. El primer texto que escribas no quedará perfecto. No pasa conmigo ni con los mejores autores. En este sentido te revelaré un secreto: el autor de un texto lo quiere mejorar cada vez que lo lee. Así, céntrate en escribir y ya después ajustas para escribir un libro profesional. 

c) Establece metas. De acuerdo con tus actividades pueden ser metas diarias o semanales. Mi recomendación siempre es que tus objetivos de escritura sean en palabras y no en tiempo. Por ejemplo, decides escribir una hora por día, pero divagas mucho toda la sesión. Al final no habrás escrito casi nada. En cambio, si tu objetivo son quinientas palabras, aunque divagues, estarás más pendiente de estar escribiendo.  

d) No temas al bloqueo del escritor. Entendamos como bloqueo cuando han pasado varias sesiones donde no puedes escribir. Cuando estás escribiendo un libro es normal que tengas momentos en los que debas hacer una pequeña pausa para aclarar tus ideas o buscar información. Ahora bien, si fuera el caso de que realmente tienes un bloqueo, tómalo con calma. Date un espacio para que descanse tu mente tratando de no presionarte.

7. Edita y Revisa tu Manuscrito

Es importante que revises tu manuscrito, pero es necesario que un editor profesional lo haga también. Mira, cada vez que tú revises tu texto querrás hacer modificaciones con la intención de que se comprenda mejor. El problema es que, a veces, provocas lo contrario; además, hacer tantos cambios puede generar errores de redacción, de dedo o de continuidad. Por si fuera poco, de tanto leer tu manuscrito llega un momento en el que ya no identificas los errores. Ahí es donde entra el profesional de la edición.

Pasos para editar y revisar tu manuscrito:

a) Descansa antes de editar. Una vez que hayas terminado tu manuscrito, tómate al menos una semana de descanso. De esta manera lograrás que tu mente tenga más claridad y un mejor juicio a la hora de revisar tu obra.

b) Edita en múltiples rondas. A la hora de volver a leer tu libro habrá muchos cambios que quieras hacerle. Eso no necesariamente es malo, pero puedes perder el foco de qué estás buscando corregir. Por esa razón es mejor hacerlo por partes cuando no eres un profesional.

  • Primera ronda: Corrige errores gramaticales y ortográficos.
  • Segunda ronda: Mejora la coherencia y la fluidez del texto.
  • Tercera ronda: Verifica la precisión de los datos y citas.

c) Editor profesional. Comprendo que la tecnología o tu presupuesto te lleven a concluir que no es necesario contratar a un humano profesional para este proceso. Bueno, como experto en el ramo editorial te aseguro que sí lo es.

8. Recibe Retroalimentación

 

Por favor, no le pidas a cualquiera que lea tu libro. Es común que quieras darle tu manuscrito a tus seres queridos para que lo lean, pero ellos no son tu lector meta. Por un lado, su crítica tal vez solo te haga sentir mal y no aporte ninguna solución. También, sabiendo que te pueden hacer sentir mal y como te quieren, evitarán decirte la verdad de lo que piensan. Es por ello por lo que, con el fin de obtener retroalimentación de mayor calidad, solo le des tu manuscrito a tres tipos de personas:

a) Tu lector meta. Identifica a una o varias personas dentro de tus conocidos que cumpla con los criterios de tu lector ideal. Antes de pedirle que lea tu libro, indaga si le gusta leer y si el tema de tu libro sería relevante para ese momento de su vida. Si te dice que lee poco y que ese problema en su vida lo resolverá más adelante, seguramente no leerá tu libro.

La retroalimentación que pedirás a tu lector meta es para saber si este entiende lo que escribes y confirmar que sea fácil de implementar. Eventualmente, si la persona de verdad pone en práctica lo aprendido, podrías confirmar que da resultados.

b) Experto en el área. Aquí te conviene buscar a la persona más honesta que conozcas. Puede ser alguno de tus mentores o profesores. Dado que no es tu lector meta y, seguramente, no le interesa mucho leer tu libro, sería conveniente que le des una fecha límite y expreses que es importante para ti. La intención es hacerle sentir comprometido. Llega a pasar que tiene toda la disposición, pero no lo toman con la seriedad necesaria.

La información que pedirás al experto es sobre la calidad del contenido tomando en cuenta para quién escribes, respaldo y ejercicios (de ser el caso).

c) Profesional de la edición. Básicamente, deberá entregarte un informe literario. La retroalimentación será más técnica en cuanto a que haya un buen hilo conductual, que se cumplan tus objetivos como autor, que el estilo sea correcto respecto al lector meta, etc.

Guarda este artículo para que lo puedas consultar durante tu proceso de escritura. Una vez llegado al paso 8, lo que sigue es preparar tu libro para su publicación; pero antes de que te adelantes a ese punto, te recomiendo que definas qué tipo de proceso necesitas tú para escribir y publicar tu libro. Así, antes de que pierdas tiempo pensando que lo puedes hacer sin ayuda o pierdas dinero creyendo que un curso sería lo ideal, mejor responde un test que hemos desarrollado que te permitirá descubrir cuál es el mejor camino para ti de acuerdo con tu personalidad y qué se necesita para publicar un libro.

TEST DE PERSONALIDAD DE AUTOR

¿No sabes si comprar un curso para escribir tu libro o buscar tutoriales en YouTube?

No pierdas tiempo con un método que no funciona para ti. A través de este test podrás descubrir cuál es tu tipo de personalidad de autor y definir qué método te dará las mejores posibilidades de éxito.